La seguridad de una red informática es algo que debe estar presente en cualquier empresa hoy en día. Los servidores, equipos, smartphones, tablets y resto de dispositivos están interconectados entre sí mediante una red generada, en la mayoría de los casos, por un simple router instalado por la operadora.
Esta protección no es suficiente. Los intentos de ataque provenientes del exterior contra estos dispositivos pueden provocar grandes daños en los activos de la empresa. Son muchos los casos en los que nos hemos encontrado con servidores cifrados por virus ransomware al haber conseguido acceder, a través terminal server, al sistema operativo del servidor haciendo uso de algoritmos de fuerza bruta para «adivinar» la contraseña de acceso.
A su vez, existen virus que infectan los gestores de correo electrónico de los puestos de trabajo mandando gran cantidad de e-mails spam por segundo al exterior de dicha red. En estos casos, la operadora que provee de acceso a Internet a la empresa suele cortar la comunicación por motivos de seguridad hasta que la situación sea subsanada.
Pero, ¿hay alguna manera de prevenir esto? la respuesta es sí: instalando un firewall
En breves palabras un firewall es un dispositivo de seguridad informático que se instala en una red cuyo objetivo es, entre otros, monitorizar todo el tráfico de red entrante y saliente y decidir, en base a unas reglas previamente configuradas, si aceptar o rechazar dicho tráfico.
En palabras mundanas, se podría decir que es como un policía que se encarga de observar en todo momento si existen accesos no autorizados o situaciones irregulares en la red informática.
Los firewalls corporativos cumplen además con otros cometidos, como son:
- Permitir la comunicación remota y segura de un dispositivo con la red de la empresa mediante VPN (por ejemplo: para teletrabajar).
- Controlar y redireccionar puertos entrantes a dispositivos conectados en la red de forma segura y con un filtrado exigente.
- Establecer una separación física entre las diferentes redes gestionadas por el firewall con el objeto de proteger los activos informáticos. Por ejemplo: separar físicamente la red inalámbrica de la cableada para que en el caso de que alguien se conecte por WiFi, no pueda acceder a servidores u otros dispositivos que se encuentren conectados a través de un cable de red físico.
- Interconectar redes en distintas ubicaciones dando la sensación de que todos los dispositivos se encuentran conectados a una única red.
- Controlar la navegación web en base a categorías o palabras previamente definidas como permitidas o denegadas. Esto es muy útil en colegios para controlar la navegación de los alumnos.
- Garantizar la salida del tráfico hacia Internet en caso de caída de la red principal, conmutando las conexiones hacia una salida redundante (en caso de disponerla) como por ejemplo una segunda instalación de fibra, una tarjeta SIM con tarifa de datos, etc.
- Distribuir y balancear la carga de red de cada dispositivo conectado para garantizar un mínimo ancho de banda a cada usuario.
Si antes desconocías qué era un firewall y para qué servía, esperamos que con esta explicación hayas cogido conciencia de la importancia de la seguridad en las redes informáticas. En InfoRepara instalamos y configuramos firewalls en empresas para garantizar la seguridad de la red y cumplir con el Reglamento General de Protección de Datos.