Nuestro equipo se ha trasladado a la localidad de Rentería para la instalación de un armario rack que distribuya red a todas y cada una de las tomas dispuestas en las oficinas de un pabellón.
Al llegar, nos encontramos que el cableado estaba echado por los tubos corrugados hasta cada una de las tomas de las oficinas pero estaban sin parchear ni verificar.
La instalación
El primer paso consistió en instalar los keystones (conectores terminales) a cada uno de los cables de red. Para ello, se separaron los 4 pares de hilos de los que se compone cada cable y se fue parcheando uno a uno en los keystones correspondientes.
Una vez realizada la instalación de los conectores, se anclaron al panel de parcheo para fijarlos y poder así realizar las conexiones posteriores. Para evitar que un tirón involuntario pudiera soltar alguno de los hilos parcheados en los keystones, se fijaron los cables de red con bridas al peine del panel de parcheo.
Procedimos entonces a comprobar los cables extremo a extremo haciendo uso de un tester de red, una máquina que se encarga de enviar una señal por los 8 hilos y comprueba si dicha señal se recibe en el otro extremo del cable. Además, el tester nos permite saber si el orden de parcheo de los cables es el correcto o si, por el contrario, alguno de los hilos está en una posición incorrecta, lo que podría derivar en un problema de comunicación en el dispositivo en el que se conecte.
En el siguiente paso, trasladamos la manguera de cables de red al interior del armario rack y procedimos a instalar el panel guiacables y el switch de red TP-Link de 24 puertos gestionable. El nexo de unión entre los keystones y el switch fueron los pequeños latiguillos de red que hicimos, de forma manual, para evitar un exceso de cableado dentro del armario, lo que podría dificultar el mantenimiento o la detección de averías en la red en caso de que las hubiera.
Poco a poco el armario fue cogiendo forma así que en el siguiente paso procedimos a instalar la ONT y el router de Movistar, interconectando dichos elementos con el switch TP-Link para dotar de acceso a Internet a todas y cada una de las tomas.
Los cables de los transformadores y de la fibra fueron embridados con sumo cuidado para evitar dañar el cable y que, de esta forma, quedasen de la forma más recogida posible.
El armario rack ya estaba prácticamente listo. Tan solo tuvimos que realizar las últimas comprobaciones para ver que todo el cableado estaba correctamente conectado sin estar tirante y, finalmente, instalamos las puertas laterales y frontal para concluir la instalación.