¿Alguna vez te ha pasado que al ir a encender tu portátil no se ve nada en la pantalla? Pruebas a apagar y encender de nuevo ya que el otro día te estuvo funcionando sin problemas pero el resultado sigue siendo el mismo. ¿Quieres saber qué es lo que está pasando?
Existen varios factores por los que un ordenador portátil no muestre imagen alguna en pantalla. Algunos de ellos son los siguientes:
- Pantalla LCD dañada.
- Cable flex desconectado en uno de sus extremos, seccionado o pinzado en algún punto intermedio.
- Memoria ram mal colocada.
- Chip gráfico desoldado o dañado.
En este post, vamos a explicar brevemente cómo diagnosticar y determinar cuál es el problema ante el que nos encontramos y qué se puede hacer para solucionarlo. ¡Vamos allá!
Pantalla LCD dañada
Normalmente este tipo de problema suele ser visible ya que presenta un daño físico en la propia pantalla, tal y como se ve en la imagen a continuación:
Este es el caso más obvio por el cual no se muestra la imagen en pantalla y no necesita explicación adicional. Sin embargo, si la pantalla está intacta, puede ser que se haya dañado la retroiluminación de la misma. Es decir, la imagen si que se estaría mostrando pero para poder apreciarlo, sería necesario fijarse de manera muy cuidadosa a escasos centímetros de la pantalla. Podría ser de gran ayuda utilizar una pequeña linterna y enfocar la pantalla para comprobar si existe alguna imagen.
En caso de que este sea el problema, la reparación pasaría por sustituir el inverter o la pantalla en sí en caso de ser LED, ya que la retroiluminación está integrada en la propia pantalla.
Cable flex desconectado, seccionado o pinzado
En algunas ocasiones, el continuo abrir y cerrar de la pantalla de un portátil, puede provocar un pinzamiento en alguno de los cables integrados del cable flex cable que une la pantalla LCD con la placa base. Para comprobar si nos encontramos ante este problema, nuestra recomendación es ir abriendo/cerrando la pantalla lentamente hasta sus topes y mirar si en algún punto la pantalla llega a mostrar imagen. En caso de ser así, será necesario desmontar el portátil y comprobar si el cable flex está seccionado o simplemente se encontraba pinzado por la bisagra de la pantalla.
En el peor de los casos, será necesario sustituir el cable por uno nuevo. El coste de este tipo de cable no es elevado y lo peor de esta solución es el hecho de tener que desmontar y montar el portátil para sustituir dicho cable.
Si por el contrario, al abrir y cerrar la pantalla en ningún momento se apreciase imagen alguna, será necesario igualmente desmontar el portátil y comprobar si los extremos de dicho cable se encuentran correctamente contados. Aunque esto no suele ser el problema habitual ya que normalmente estos cables incorporan una cinta adhesiva que une el extremo del cable con el propio conector, evitando que se pueda desconectar por algún tirón.
Memoria ram mal colocada
En varias ocasiones, nos ha ocurrido en el taller, que el motivo por el que el portátil no daba señal gráfica era porque el módulo de la memoria RAM se había desplazado unos milímetros y no estaba haciendo buen contacto en sus pines. Para comprobar si este es el problema, hay que abrir el compartimento donde se ubica la memoria ram (protegido por uno o dos tornillos) y recolocar nuevamente cada uno de los módulos.
Además de esto, aconsejamos forzar un poco (sin aplicar demasiada presión) los cierres que sujetan los módulos de memoria, ya que puede que tengan alguna holgura permitiendo que la memoria se desplace ante cualquier movimiento brusco.
Chip gráfico desoldado o dañado
Sin duda, este es el problema más común hoy en día (por lo que hemos visto en InfoRepara). Este problema suele venir ocasionado por no realizar un mantenimiento periódico del ordenador. La electricidad estática que los ordenadores generan, a través de sus componentes electrónicos, atrae polvo que con el paso del tiempo se acaba transformado en una película de porquería que tapona la salida del ventilador.
El aire caliente generado, no sale al exterior del portátil retornando al interior del mismo y recalentando el resto de los componentes que encuentra a su paso. Si a esto le sumamos que la pasta térmica ha perdido sus propiedades de disipar el calor de una superficie a otra y la elevada temperatura del chip gráfico, puede darse el caso de que este se desuelde parcialmente o incluso llegue a dañarse de forma irreversible.
En el caso de que el chip gráfico se desuelde parcialmente, será necesario utilizar una estación de soldadura profesional y una pistola de aire caliente. Este proceso denominado «Reflow«, en líneas generales, consiste en precalentar el chip gráfico a una temperatura determinada. Cuando esté lo suficientemente caliente, se aplicaría líquido flux para que el estaño se reagrupe en los puntos de soldadura y posteriormente se volvería aplicar la pistola de aire caliente a una temperatura superior.
Finalizado el proceso, se volvería a montar todo el portátil y se testearía mediante programas de benchmark para comprobar si el rendimiento gráfico es correcto y no presenta problemas.
Si por el contrario el chip gráfico ha resultado dañado por el exceso de calor, la única solución sería sustituirlo realizando un proceso denominado «Reballing» el cual consiste en desoldar completamente el chip gráfico y sustituirlo por uno nuevo. Este proceso es mucho más costoso en tiempo y, por consiguiente, el importe de la reparación ascendería más que con un simple reflow.
Resumen final
Todas las soluciones que hemos explicado en este post han sido comentadas en base a la experiencia que en InfoRepara hemos adquirido con este tipo de problema. Si bien es cierto que existen más factores que ocasionen la pérdida de la señal gráfica en la pantalla, los más comunes son los que hemos explicado en párrafos superiores
¿Quieres saber cuál de estos problemas tiene tu ordenador pero no te atreves a hacer pruebas por tu cuenta? No te preocupes, en InfoRepara realizamos diagnóstico sin compromiso alguno.